
Poca capacidad de las autoridades
La optima función de las autoridades respecto a la contaminación ambiental en nuestra ciudad es el de realizar un buen acopio de basura y organizar campañas de concientización social. Esto debería contribuir con el bienestar de la población y fortalecer una buena relación con las autoridades. Sin embargo, la ausencia de las entidades públicas y privadas frente a solucionar este problema se ha visto casi nula. Por ello, en las siguientes líneas, se explicará los factores que han agravado la contaminación en nuestra comunidad.
Por una parte, existe la responsabilidad por parte de las instituciones públicas y privadas frente a la contaminación ambiental. Dado que las políticas dadas por los municipios provinciales y gobiernos regionales carecen de optimización e implementación de recursos que deben ser estudiados teniendo en cuenta al crecimiento urbano, como menciono Jamie Escobar. Entonces se puede observar en la mayoría de distritos en los que hay un desabasto de lugares donde se pueda acopiar los desechos sólidos de manera adecuada. Esto ha dado a relucir la poca prioridad que los municipios distritales dan a este mediático y urgente problema. Y es así que los mismos pobladores tomen en su mayoría como principal lugar de acumulación las intersecciones de las calles o espacios destinados a áreas verdes. Sin embargo, Pedro Cárdenas nos comenta, que el ministerio de salud (MINSA) ha normado acerca de temas de contaminación ambiental que permitan disminuir la tasa de mortalidad y mortandad. Como también se han diseñado programas de manejo de residuos sólidos por parte de la Dirección General de Gestión Ambiental (DIGESA). De igual manera, el Conam lleva una coordinación con las autoridades locales y regionales de mantener una cultura de protección conservación ambiental desde una temprana edad. Esto nos da a conocer que si existe una acción por parte del gobierno pero que es notoriamente insuficiente para los niveles de contaminación que nuestra ciudad padece.
Por otra parte, el poco compromiso que muestran los ciudadanos a vivir rodeados de la irresponsabilidad con sus desperdicios y desechos. De este modo, podemos identificar qué la participación de la población y educación ambiental de esta, sobre los problemas de contaminación se ve muy arraigada. Dado que, muchos no se sienten identificados plenamente como “ciudadanos” según nos comenta Liliana Santivañez. También nos comenta, ellos creen que la responsabilidad de solucionar los problemas ambientales únicamente recae sobre las autoridades municipales o estatales. De esta manera, estos toman actitudes antropogénicas que recaen en un origen basado en la industrialización, comercio sobrepoblación y otros factores. Es así, que se entiende por qué muchas personas no sienten la necesidad de deshacerse de manera correcta de los desperdicios, teniendo así como cómplice más cercano las vías públicas, áreas verdes y otro tipo de lugares no apropiados para el acopio de basura. Entonces, esto lleva a la aparición y propagación de nuevos roedores e insectos, que, su vez, generan enfermedades de fácil contagio; por eso, el ciudadano no llega a ser consciente de estos nuevos males, responsabilizando sus municipios.
En síntesis, uno de los factores importantes de la contaminación que hoy nos es agobiante. Por un lado, la poca reacción y responsabilidad que presentan los gobiernos locales y estatales. Por otro lado, el compromiso paupérrimo de los ciudadanos. Frente a este grave problema social, es importante que las autoridades y ciudadanía conjunta tome conciencia y sobre todo responsabilidad, mediante el establecimiento de nuevas leyes, normas y programas sociales que mejoren el acopio responsable de basura y una buena educación ambiental.

El distrito piurano de Tambogrande, la municipalidad distrital anunció la puesta en marcha de una campaña de recojo de inservibles.